Las tierras raras, un grupo de 17 elementos químicos, están cobrando una relevancia sin precedentes en el panorama tecnológico actual. Estos minerales, que incluyen elementos como el neodimio y el disprosio, son fundamentales en la fabricación de dispositivos electrónicos, imanes potentes y baterías, lo que los convierte en pilares de la revolución digital y la transición hacia energías limpias.
A medida que la demanda por tecnologías sostenibles y dispositivos electrónicos continúa en aumento, la necesidad de asegurar el suministro de tierras raras se vuelve crítica. Sin embargo, la concentración de su producción en pocos países plantea desafíos geopolíticos y económicos, lo que lleva a las naciones a explorar alternativas para diversificar sus fuentes de aprovisionamiento.
La explotación y el reciclaje de estos minerales están en el centro de debates sobre sostenibilidad y responsabilidad ambiental, ya que su extracción puede tener un impacto significativo en el ecosistema. A medida que el mundo se mueve hacia una economía más verde, la gestión adecuada de las tierras raras será esencial para garantizar un futuro tecnológico sostenible.
Fuente: Infobae